Recortar los tallos: cuando recibas la flor, corta todos los tallos a al menos 2 pulgadas de largo y repite cada dos o tres días.
La superficie accesible para la absorción aumenta cortando los tallos en ángulo diagonal.
Cambia el agua: Para reducir el crecimiento bacteriano, cambia el agua del ramo cada dos o tres días con agua tibia, lo que puedes hacer cuando lleves las flores a podar.
(Las bacterias no solo pueden bloquear los tallos e impedir que absorban adecuadamente el agua, sino que también pueden hacer que todo el ramo huela mal).
Tenga en cuenta que la ubicación lo es todo: las flores cortadas duran más en temperaturas más frías, así que manténgalas alejadas de la luz solar directa y del calor.
Mantener las flores alejadas del frutero mientras la fruta madura puede liberar gas etileno, lo que acortaría la vida de las flores.
Receta de flores:
Combine 1 cucharadita de azúcar, 1 cucharadita de blanqueador y 2 cucharadas de jugo de limón o lima en un litro de agua.
¡Simplemente colócalo en tu jarrón y listo!
Flores que han sido recién nutridas.